¡Yo te amo córdoba de mi ensueño !
¡Como alumno que fui de lo sagrado,
al contemplar tu templo tan dorado,
me siento traspasado en loco empeño!
¡Al mundo lo dejas anonadado,
con tu rico y noble patrimonio!
¡Del universal arte testimonio,
cuatro veces ya ha sido declarado!
¡De la sabiduría clara fuente,
que jubilosa mana dulce calma!
¡Qué hermoso, qué precioso que es tu canto,
que impulsa , que alimenta a sabia gente!
¡Oh Córdoba, Córdoba de mi alma!
¡Bellísima ciudad de gran encanto!
Córdoba 12 de febrero de 2020
Magnifico como siempre, en tus escritos dejas bien claro la admiración y el amor que sientes por Córdoba, a ver cuando ella de corresponde y te nombra hijo predilecto.
ResponderEliminarGracias José. Sí amo a Córdoba pero no creo que merezca semejante honor
ResponderEliminarMe uno a tu admiración por Cordoba.
ResponderEliminarSi se tratara de una mujer diría que es guapa de cojones, con una belleza entreverada de judía, mora y cristiana.
De mis tres cursos en el seminario de S. Pelagio he olvidado muchas cosas, pero los paseos con mis amigos por todos sus avenidas y rincones no.
Un abrazo.
Gracias Pedro. Lástima que una ciudad tan hermosa y monumental esté tal olvidada por las administraciones. Un abrazo
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuy bien. Se palpa ese sentimiento a nuestra Córdoba.
ResponderEliminarGracias Manuel, Me alegra que te haya gustado
ResponderEliminarFernando, bonito, alegre, animoso y cariñoso, como bien han comentado anteriormente como amas tu ciudad y que bien lo demuestras.
ResponderEliminarMuchas gracias Lourdes. Me siento tan triste y frustrado cuando veo que las administraciones la tienen plantada en la cola de las inversiones, en el rincón del olvido. Lo siento como una afrenta personal. Por eso yo canto su gloria y su belleza y nunca me cansaré de hacerlo
ResponderEliminar