Si te encuentras triste
herido y cansado.
Si ves que tu vida
casi se ha acabado.
Si la soledad
en ti se ha cebado.
Si no ves futuro,
si estás apagado...
¡Busca a tus amigos,
ponlos a tu lado!
¡Ellos te comprenden
pues son como hermanos!
¡Gozas de su apoyo,
cógete a sus manos;
te escuchan, te quieren,
te dan mil abrazos!
¡Comparten tu pena,
lloran con tu llanto;
te animan, te empujan
hacia un cielo claro,
hacia un mar abierto,
tranquilo y calmado!
¡Son tus cirineos,
son tus alïados!
¡Ellos te enderezan
si tú estás doblado!
¡Cuando tu camino
esté enrevesado,
cuando ya no puedas
seguir avanzando;
cuando estés metido
en hondo barranco...!
¡Llama a tus amigos,
no debes dudarlo!
¡Ellos son la luz
que guía tus pasos!
¡Así tu camino
duro y empinado,
oscuro y oculto,
desierto y helado...
con ellos contigo
podrás superarlo!
Córdoba 14 de mayo de 2022
Es un placer recobrarte deleitándonos con tus amables y canoros versos.
ResponderEliminarAmigos como los que describes no son amigos sino ángeles. En cualquier caso la amistad es un regalo de la vida mayor que otros bienes materiales.
Confío en que estés bien de salud y mantengas el buen ánimo que te caracteriza.
Un abrazo, amigo.
Fíjate que desde el año pasado no visito el blog. ¡Casi un año! Gracias por tu comentario pues tú eres uno de esos amigos que levantan el ánimo. Desde hace un tiempo también lo es tu esposa. Un abrazo desde Córdoba
ResponderEliminarUn cordial abrazo. Mónica y yo os tenemos presentes a menudo. Cuidaos mucho y seguid mirando el lado positivo de la vida.
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